Capitalización de créditos en la startup
La financiación de una startup pasa en muchas ocasiones por la toma de participación en su capital social, ya lo sea en rondas de inversión o bien por la capitalización de créditos. En ambos casos, la operación se articula mediante un aumento de capital: cuando nos hallamos en una ronda de inversión el inversor recibe participaciones sociales a cambio de su aportación dineraria; por su parte, en la capitalización de créditos, el acreedor convierte su crédito en capital social.
Vamos a centrarnos en el supuesto de la capitalización de créditos, aclarando las cuestiones fundamentales sobre esta figura.
¿Qué es?
La capitalización de créditos es una herramienta que consiste básicamente en sustituir (compensar) la obligación de pago en efectivo de un crédito por la entrega de participación social. Para entenderlo fácilmente podemos decir que pagamos el crédito con participaciones sociales. Consecuentemente, el acreedor pasa a ser titular de un porcentaje del capital de nuestra sociedad, o lo que es lo mismo: se convierte en socio (o aumenta su participación si ya lo era).
¿Con qué clase créditos se puede utilizar?
Si bien su utilización más frecuente suele ser con préstamos, este mecanismo puede utilizarse con créditos de distinta naturaleza como, por ejemplo, el derivado de facturas por servicios.